Las Lunas.

En Valencia. Calle Císcar 35. A simple vista no entrarías porque parece para gente de cierta edad y un poco clásico en su decoración pero siempre sorprende la calidad de los platos del menú diario porque son muy caseros pero con una muy buena presentación y un sabor muy potente. El trato de los camareros es super correcto y muy atento.

Abajo: Crema de guisantes con jamón, roast beef a la inglesa con crema de mostaza y mezclum, ensalada de salmón ahumado con verduritas y vinagreta de frutos secos y meloso de chipirones y gambitas.

(Cris Muñoz)






La Vinoteca.

Pese a llevar poco tiempo abierto este restaurante se ha convertido en uno de los imprescindibles de Santander. Tanto para ir de tapeo como para una comida o una cena más formales. Aconsejo escuchar las recomendaciones de Koldo, que siempre esta al tanto de las innovaciones culinarias que su socio Luis lleva a cabo en los fogones.

Gambas a la sal. Gambas rojas marroquíes hechas siete minutos a la sal (prácticamente crudas) y acompañadas de una concasse de tomate junto con el sabor de las cabezas de la gamba y ajoblanco. Escabeche de Corvina con verduras al dente, entraña de buey con verduras y arroz con leche casero acompañado con hojaldre y helado de vainilla.

(Cristina Fernández)